El director de Tiempos violentos responde tajante.
Unos los aman y otros los odian, pero nadie que ame el cine puede escapar del debate de los superhéroes. ¿Fenómeno? ¿Moda pasajera? ¿Resiliencia? ¿Implosión? ¿Parques temáticos? Hemos escuchado todos los argumentos en los últimos años, unos por parte de algunos de los mejores directores de todos los tiempos. Ahora es turno de Quentin Tarantino.
El director responsable de éxitos como Tiempos violentos, Kill Bill y Había una vez en Hollywood recién publicó Cinema Speculation, un libro de ensayos en el que comparte algunas de las experiencias cinéfilas que marcaron su vida. Esto incluye obras sumamente populares como Star Wars, la cual vio por primera vez cuando tenía 14 años. Sin embargo, no hay una sola mención al cine de superhéroes. Ni el Superman de Christopher Reeve, ni el Batman de Tim Burton, mucho menos el Spider-Man de Raimi o el Marvel Cinematic Universe.
Esta situación no pasó desapercibida para Los Angeles Times, que no desaprovechó la oportunidad para preguntarle al respecto. Así como en su momento Steven Spielberg equiparó el subgénero con el western, Quentin Tarantino hace lo propio con el musical, al que acusa de una “monopolización”.
Asegura que las adaptaciones de cómics “una monopolización similar”. Así como el musical alcanzó un pico de popularidad para luego perder fuerza, el director está convencido que muchos “no pueden esperar al día en que puedan decir lo mismo de las películas de superhéroes”. ¿Cuándo se dará? El momento, por ahora, se siente muy lejano.
No menos importante fue que luego de hablar sobre los esfuerzos de Marvel y DC por contratar grandes cineastas para sus respectivas producciones, muchos incluso con el carácter de autor, Quentin Tarantino fue cuestionado sobre las posibilidades de integrarse al subgénero. La respuesta fue un rotundo no.
“Tienes que ser un asalariado para hacer esas cosas”, declaró tajante. “Yo no soy un asalariado. No estoy buscando trabajo”.
Para ser justos, nadie esperaba realmente que Quentin Tarantino dirigiera una película de superhéroes. Nuestra preocupación con el director es otra: desde hace años aseguró que sólo haría diez películas. ¡Sólo le falta una para alcanzar la cifra! ¿Cumplirá su promesa? De ser así, sólo esperamos que se despida por todo lo alto y con un filme que saque a relucir las mejores cualidades de uno de los grandes talentos de su tiempo.
