Y no sólo eso. ¡El escritor está convencido que la actriz merecía la estatuilla!
La temporada de premios siempre desemboca en incontables conversaciones relacionadas con el Óscar. Sobre las ediciones en marcha, pero también las de años anteriores, con todo tipo de especulaciones sobre lo que fue y lo que pudo ser. Stephen King no es ajeno a la tendencia y aunque sus adaptaciones nunca han gozado de gran éxito entre la Academia, sí que considera que una que otra película basada en su obra merecía más amor de los votantes. Y Cujo, con Dee Wallace, no es la excepción.
No se refería a la tan controvertida El resplandor (1980) que no cosechó una sola nominación, ni a Sueño de fuga (1994) que fue blanqueada tras ser incluida en siete ternas incluyendo Mejor película. El escritor habla de Cujo (1983), sobre un perro rabioso que desata una ola de terror en un pequeño pueblo estadounidense y que, según su criterio, debió valerle una nominación al Óscar a su protagonista Dee Wallace en la categoría de Mejor actriz [vía].
“Otro de los otros que realmente es genial fue Cujo. Pensé, de nuevo, éste es el tipo de conversación en la que te metes con la gente sobre la temporada de premios y quién es nominado y quién no. Dee Wallace debió de haber sido nominada para un premio de la Academia, y en mi opinión debió haberlo ganado. Simplemente la pasaron por alto”, dijo Stephen King.
Lo cierto es que la Academia nunca ha manifestado un gran aprecio por el terror, pues el género sólo ha cosechado seis nominaciones a Mejor película en toda la historia del certamen. La única victoria ha sido para El silencio de los inocentes (1991) que, además, es una fusión con thriller.
Aunque para ser justos, lo cierto es que Cujo no tuvo un buen recorrido en la temporada de premios, pues sólo acumuló una victoria en Fantasporto y tres nominaciones más en certámenes menores. Ninguno de estos reconocimientos fue para su protagonista. La película tampoco tuvo la mejor recepción por parte de la crítica al acumular un 62% en Rotten Tomatoes.
Por su parte, Dee Wallace nunca recibió una nominación al Óscar. Le queda el nada desdeñable consuelo de haber participado en uno de los grandes clásicos cinematográficos de todos los tiempos como E.T., el extraterrestre (1982) y de haberse convertido en un referente del terror con Aullido (1981), Critters (1986) y la propia Cujo.
Y en el caso de Stephen King, el tiempo sí que ha reconocido a Cujo. La película se mantiene entre las adaptaciones más populares de su obra y con un incuestionable estatus de culto entre las audiencias.
