Es común que en nuestro país se describa a Alejandro González Iñárritu como uno de los mejores directores mexicanos de todos los tiempos. La etiqueta, sin embargo, cada vez le queda más pequeña, pues hace tiempo que el cineasta rompió las fronteras nacionales para convertirse en un genio de clase mundial. Como prueba los incontables galardones cosechados a lo largo de su carrera, entre los que sobresalen sus cuatro Premios de la Academia. Más importante el legado de una obra compleja que siempre ha mostrado un profundo interés en la naturaleza humana. ¿Cuál es la joya de su corona? Descúbrelo en nuestro ranking de Alejandro González Iñárritu.
Biutiful
Biutiful sería uno de los puntos más altos en la filmografía de casi cualquier cineasta. Irónicamente, no es el caso de Alejandro González Iñárritu, dueño de una obra tan potente que la película se ve relegada al último lugar de este ranking. La razón puede atribuirse a un cambio de fórmula del realizador, quien por primera vez en su carrera dejó atrás los ensambles para decantarse por un estudio individual enfocado en el personaje de Javier Barden y su transición de la vida a la muerte a causa de un cáncer terminal. Su mayor mérito no fue la nominación al Oscar de su protagonista, sino que sentó muchas bases de historias más complejas como Birdman y El renacido.
21 Gramos
¿Cuál es el peso del alma? Alejandro González Iñárritu se plantea esta duda en 21 gramos, segunda entrega de su Trilogía del Dolor. El mexicano repite parcialmente la fórmula vista en Amores perros, con historias entrecruzadas por la tragedia, pero que en este caso apelan más a lo particular que a lo general. Estas decisiones hicieron que el impacto fuera menor y contribuyeron a que la película fuera vista como uno de los eslabones más flojos en la trayectoria del cineasta. Una etiqueta relativa que, más que falta de calidad, debe atribuirse al altísimo nivel de toda su obra.
Babel
Babel suele verse como el punto más alto de la Trilogía del Dolor. Una aseveración desafiante que suele ser atribuida a su elenco de primer nivel encabezado por Brad Pitt y Cate Blanchett, así como a sus numerosos reconocimientos. Lo que nadie puede negar es que fue la cinta que marcó su madurez en la industria y sobre todo como artista, con una nueva exploración del sufrimiento humano, sólo que esta vez dotado de tenues brillos de esperanza con los que se demuestra que la vida no viene en blancos y negros, sino en todo tipo de matices.
Birdman
Alejandro González Iñárritu ha sido uno de los cineastas más críticos con las adaptaciones de comics, siendo Birdman su exquisita carta de protesta. No es una película de superhéroes per se, sino la historia de un actor que lucha por salir del encasillamiento provocado por la interpretación de uno de estos personajes. Una brillante metanarrativa que difumina las fronteras entre histrión y personaje, y cuyo mensaje se potencia con la elección de Michael Keaton para el rol estelar, cuya carrera ascendente se fiera frenada por Batman. Curiosa ironía, a más de 30 años de la adaptación gótica, el actor no es capaz de desprenderse completamente del murciélago, luego dd que fuera reclutado para regresar como un viejo encapotado en el DC Extended Universe. Fue la película que llevó al cineasta a la élite hollywoodense con sus tres primeros Premios de la Academia: Mejor película, director y guion original.
Amores perros
Alejandro González Iñárritu no pudo elegir un mejor modo de comenzar su Trilogía del Dolor. Porque si hay algo que refleja Amores perros es precisamente eso, los pesares que aquejan sobre las personas sin distinción de género, edad o condición socioeconómica. Esto a través de tres historias entrelazadas por un violento accidente automovilístico que se convirtió en una de las escenas más representativas de su tiempo y con el que se enfatiza que la tragedia siempre termina haciéndose presente en nuestras vidas. Un drama urbano en toda la extensión del término que marcó un antes y un después en la historia del cine mexicano.
El renacido
Uno de los mejores exponentes del western crepuscular contemporáneo. El renacido aborda la historia de un hombre traicionado por los suyos y que debe valerse de sus más fieros instintos para sobrevivir en territorio inhóspito. Un reencuentro del hombre con su estado puro y que resulta en un verdadero renacimiento simbólico. El talento de Alejandro González fue clave en el éxito de una historia sumamente desafiante, pero sus intenciones se vieron respaldadas con una espectacular fotografía de Emmanuel Lubezki y una brillante interpretación de Leonardo DiCaprio que le valió su tan codiciado primer Premio de la Academia. Iñárritu también fue galardonado con la estatuilla, en su caso a Mejor director.
